Fuimos una reunión de familiar, 29 personas en total, de diferentes puntos Barcelona, Bilbao y Madrid, que no tenemos ocasión de vernos y de paso celebrar mi 40 aniversario de boda, ha sido un fin de semana inolvidable doy las gracias a Manolo por el trato y colaboración que hemos recibido. Las casas y el entorno fantásticos, me reitero en lo dicho muchas gracias.

Hace unos días estuvimos en esta casa rural y quisiera recomendarla y dar las gracias a Manolo por muchos motivos. Por atendernos tan amablemente desde el momento de la reserva, sugiriéndonos y orientándonos en muchos temas luego la información tan completa y bonita que nos iba enviando del pueblo y de las opciones de paseos y hasta el ultimo momento que estuvo pendiente de nosotros haciendo sentirnos especiales y queridos. Un trato muy cercano y amable. Por tener las casas tan bonitas y bien cuidadas hasta el detalle en la decoracion, los olores, los colores, el confort, la limpieza y la autenticidad que nos encantó a todos. Por proporcionarnos un pan exquisito y un vino buenísimo. Por la iniciativa tan divertida del concurso de fotografías del pueblo que encantó a nuestros hijos y a algún adulto. Y por muchos otros detalles que seguimos recordando días después y hasta hoy. Gracias y esperamos volver el año que viene.

Nos reunimos unos amigos en este bonito pueblo y nos sorprendimos por su belleza natural y entorno. La casa es una pasada. Todo autentico y original. Todos los amigos recordábamos nuestros viajes y en ninguno habíamos estado tan a gusto. Que silencio y paz. Un fin de semana largo y tranquilo. La casa es preciosa y no sabíamos donde estar pues queríamos estar en todas partes. Gracias al dueño por su atención. Recomendamos todos los amigos a que visiten este lugar tan diferente de todo lo que existe ahora.

Nos hemos reunido varios amigos de distintos sitios de España en esta preciosa localidad. En otras quedadas nuestras salíamos constantemente de paseo para conocer la zona donde nos quedabamos, pero esta vez no quisimos ninguno movernos del pueblo, y menos los peques. El pueblo es precios, pequeñito y muy cuidado. Los niños encantados con sus calles y juegos. Su gente amable. Las casas acogedoras, preciosas y al detalle con todo. La naturaleza en su estado puro. Manolo encantador y muy educado siempre dispuesto a echar un cable a cualquier cosa que nos faltara. Y podría seguir sin parar de decir lo mucho que nos ha gustado a todos. Gracias por los dias de descanso que hemos tenido, y por encargarnos un tiempo tan bueno jjjj Sin duda volveremos.

Estuvimos pasando un fin de semana de septiembre en las casas de Navalsaz. Fuimos 15 adultos y 12 niños (incluidos dos bebés) distribuidos en tres casas: casa Mayor, casa Grande y casa Jardín. La vida en común la hacíamos en la casa Grande donde cabíamos todos para comer perfectamente. Fue una experiencia estupenda. Las casas son espectaculares por su decoración y equipamiento. Tienes todo lo que necesitas para la estancia, hasta los más mínimos detalles. Cuando llegamos estaba todo limpísimo. La atención de Manolo fue exquisita: discreto pero siempre pendiente por si necesitábamos algo. Los niños podían jugar a sus anchas por el pueblo sin ningún peligro. Se lo pasaron en grande. La gente de Navalsaz, un grupo de gente mayor, muy acogedores. El lugar es muy interesante, tranquilo y hermoso, lleno de rutas para pasear. Un sitio absolutamente recomendable al que volveremos sin ninguna duda. Muchas gracias Manolo por tu acogida.

Estuvimos en Navalsaz hace ya unos días y mis hijos todavía se acuerdan de lo bien que hemos estado allí. Pudieron jugar libremente por las calles, sin horarios, sin peligros. En el pueblo nos sentíamos como en una finca privada. Los habitantes de allí son gente muy buena. Increíble el trato con los turistas. No nos ha faltado de nada. Éramos un grupo muy grande y nos daba miedo encontrarnos con problemas, pero no fue así. Todo lo contrario, solo fueron buenas sorpresas. El trato de Manolo fue exquisito, siempre dispuesto a ayudar y con un gran conocimiento de las cosas de allí. Las casas son preciosas y están al detalle con todo. No se echa de menos nada, son auténticamente Casas Rurales. Fuimos con idea de hacer excursiones pero nos sentimos tan a gusto que no salimos del pueblo en todo el tiempo. Los niños jugando por el pueblo y los adultos en la casa, disfrutando de todo aquello que no tenemos normalmente ( aire puro, naturaleza, buen vino, buena compañía, tiempo para charlar y un lugar maravilloso ). Recomiendo 100% . Manolo muchas gracias por todo y repetiremos con toda seguridad. Todos lo estamos deseando. Saludos.

Hola El pasado fin de semana hemos estado un grupo de 22 personas (12 adultos y 10 niños) distribuidos en 2 casas En una de ellas Casa Mayor con espacio suficiente para comer y estar todos juntos. .La experiencia ha sido estupenda. El recibimiento por parte de Manolo ha sido muy acogedor, pendiente de todo pero sin agobiar lo más mínimo. Las propuestas y consejos sobre la zona nos han resultado muy útiles.Varias propuestas para senderismo y con diferentes nivleles . El pueblo es pequeño y ofrece a los niños un espacio seguro (no hay carreteras) y enriquecedor para jugar ,explorar....la pena fue el tiempo, pero siendo las fechas que eran no nos pilló de sorpresa. Habrá que volver en otra época. Las casas , su decoración , integradas en su entorno . Cada momento vas decubriendo diferentes rincones con materiales reutilizados y reciclados para la decoración . En fin ha sido un finde muy agradable.

Quiero dar la enhorabuena a Manolo por una casa tan bonita y agradable. Hemos estado varias familias con muchos niños y todo ha salido genial, tal y como hemos organizado incluso mejor que lo previsto. Ya habíamos visto fotos de la casa, pero como normalmente te encuentras siempre algo peor, en este caso fue todo lo contrario. Nos hemos encontrado con una casa con tantísimo gusto, tan cuidada y con tantos detalles, que nos emocionamos. El pueblo es un lugar ideal para el disfrute de los niños, y al final no salimos de allí en casi todo el tiempo. Gracias por las indicaciones y por cuidarnos tan bien y con tanta educación. Se agradece y recomiendo.

En primer lugar tengo que dar las gracias en nombre de todos a Manolo, el propietario, tanto por su amabilidad como por su saber estar, cuando lo hemos necesitado ha estado ahí pero nunca hemos tenido la sensación de observarnos. Hemos sido un grupo de 29 personas (17 adultos y 12 niños de diferentes edades), en la casa disponíamos de todas las comodidades, nos hemos distribuido las habitaciones por familia, y las horas de las comidas hemos podido estar todos juntos, ha sido fantástico. Tanto las sugerencias de sitios para visitar por su parte, así como alguna gestión que ha realizado en nuestro nombre, han sido perfectas. Los niños han quedado encantados con el pueblo, ya que han podido jugar a su aire a pesar de la nieve y del frío, y los mayores también. Nos llevamos un gran recuerdo, por un lado de este paisaje bucólico, por otro el impresionante trato recibido. Gracias de nuevo.

Hemos estado un grupo de 16 adultos y 16 niños en las Casa Alta y la Casa Grande. Nuestra experiencia... maravillosa. El trato de Manolo... exquisito, las casas preciosas, con todo lujo de detalles, el pueblo... encantador. Ha sido un fin de semana inolvidable. Los niños se lo han pasado genial, jugando por el pueblo sin ningún peligro. Nos han faltado días para poder disfrutar más de las casas y de su entorno. Simplemente, espectacular!!

Fin de semana de amigos con niños!!! En total 16 adultos y 14 niños,,,, y gracias a estas 2 increíbles casas,,, la locura que podía haber sido, ha resultado una experiencia para repetir. Nos hemos alojado en Casa Alta y Casa Grande, con una habitación por familia y su propio baño. Un lujo. Todo muy limpio, sabanas y edredones que invitaban a dormir y disfrutar del silencio, no se oye ni un ruido por la noche. Las comidas,,,, las hacíamos en Casa Grande,, con comedor acristalado y 2 mesas con capacidad para todos. La casa dispone de menaje mas que suficiente para 30. Y espacio suficiente para que los niños jugarán. Y han disfrutado de la libertad de andar por el pueblo. Gracias a Manolo, tuvimos un desayuno espectacular, con pan bueniiisimo y bizcocho de zanahoria. Y siguiendo sus indicaciones, encargamos la cena del viernes en Posada Rita, para llevar a la casa. Muy cómodo.

Pasando un par de noches en kuadrilla, 11 adultos de los cuales había 4 parejas y una con un bebé. La reforma, decoración y equipamiento de la casa es espectacular, con mucho gusto y cuidando hasta el más mínimo detalle, muy agradable. Todas las parejas disfrutamos de baño privado en la habitación, lo que resultaba terriblemente cómodo. El trato de los dueños muy cercano, agradable y respetuoso. La zona no tiene cobertura, por lo que echamos de menos el servicio WIFI, pero esta es la única pega que le puedes encontrar. Alojamiento muy recomendable y lugar muy apropiado para desconectar.

Quiero recomendar este maravilloso destino. No sólo por su entorno y su gente, sino también por la casa que es preciosa, acogedora, limpia y muy cuidada al detalle y por la atención con la que nos han tratado. Gracias por estos días tan buenos que hemos vivido en Navalsaz.

Rincón extraordinario por multitud de circunstancias: el entorno, con muchísimas posibilidades, desde ver el parque de dinosaurios, visitar bodegas, ir a un balneario, caminar por una montaña, comprar zapatos ........ y que decir de la comida? sencillamente estupenda. Existe tambéen algo especialmente único, me refiero al pueblo de Navalsaz, se siente uno transportado a la Edad Media ....... y que decir de los dueños? un trato exquisito y permanentemente pendientes de cualquier necesidad pudiéramos tener. (Gracias) En resumen fue una excursión estupenda y que sin duda hay que repetir.

Hemos estado dos familias en Navalsaz, en la casa Mayor, muy a gusto y muy bien atendidos. Fue una experiencia genial.Una casa preciosa, y muy calentita!! Muchas opciones de ocio, aun siendo invierno.Todo muy cerca y al mismo tiempo lo suficientemente apartado como para que desconectes de todo y disfrutes de los amigos y de la familia. Gracias a Manolo por las indicaciones para comer y para los paseos por la zona. Muy recomendable !!!!

Un fin de semana en una casa maravillosa rodeada de un paisaje y una tranquilidad francamente inimaginable. La casa es una pasada!!!, limpia, cómoda, con todo lo que se puede necesitar, y muy acogedora, y que decir de la decoración, la más bonita y con más gusto de todas las casas rurales en las que he estado!!!. Hemos disfrutado del pueblo y de su gente y el trato del propietario Manolo,además de muy amable y familiar, una persona que está en todo y preocupándose por que tuviésemos una estancia inolvidable. Volveremos sin duda!!!. Muy recomendable, sobre todo para los que tenemos niños pequeños, que están por en el pueblo jugando todo el día. Gracias a Manolo por estos días tan bonitos y a todos los vecinos que en todo momento estuvieron pendientes de que estuviéramos cómodos.

Tres casas espectaculares, aunque la joya de la corona es la Casa Grande. Navalsaz, además, es una aldea preciosa, con un entorno privilegiado. Sólo hay un pero, tener que marchar de nuevo a la gran ciudad... Los propietarios, un lujo. La atención, exquisita.

Un fin de semana estupendo, gracias por habernos hecho sentir como en casa.