La casa es muy agradable, con mucha luz y , aunque está a las afueras, se llega en coche muy pronto al centro. Todo está muy limpio, muy bien organizado, y con una equipación excelente. Se han etiquetado los espacios de almacenamiento con mucha claridad y no falta de nada, tanto en útiles de limpieza como en la cocina y el baño. Tampoco faltan en la cocina aceite,sal, vinagre, azúcar , especias, papel de cocina y otros enseres que vienen muy bien cuando se acaba de llegar. Igualmente, Rafael se ha tomado la molestia de diseñar diversos itinerarios desde la casa a diferentes puntos de Ronda, que resultan muy útiles y clarificadores. Además, aporta una variedad de mapas, libros y folletos sobre la zona. Las instrucciones están perfectamente explicadas en español , inglés y francés. A nuestra llegada , teníamos una botella de agua y otra de vino, cortesía de la casa . La zona es muy tranquila y hay absoluto silencio por la noche. Rafael ha sido un anfitrión extraordinario, nos ha hecho recomendaciones muy útiles y valiosas, atento a nuestros mensajes y pendiente de nuestra comodidad . Se nota que hay esmero e interés por hacer de la estancia una experiencia placentera.