La tranquilidad que se respiraba en el ambiente,y la comodidad. Se estaba como en casa. La anfitriona se portó super bien, ya que la batidora que había en casa estaba rota e hizo por que tuviéramos una nueva.

Todo fue perfecto

La situación y el espacio

Tiene varias cosas deterioradas que le quitan elegancia

El apartamento está equipado con todo lo necesario, tiene vistas a la ría y puedes ver Vigo al fondo. Hay un par de bares/restaurantes cerca y un LIDL al lado para hacer compra. Hay parking incluido aunque puedes aparcar fácilmente en la puerta.

Nada en especial.

las vistas, el detalle del tener el café para los primeros días. El piso es muy grande y acogedor, la lamparas del techo preciosas( llevaban decoración de conchas). Había toallas de sobra, el secador de pelo funciona perfectamente( teniendo pelo largo), nos dieron papel higiénico y jabones. La cocina tenia platos y vasos suficientes y productos de limpieza y para el lavavajillas

Las almohadas demasiado blanda para nuestro gusto, pero había disponible otras en el armario. La cama de la habitación principal eran dos individuales, nos hubiera gustado mas tener un colchón matrimonial aunque era cómoda. La ducha le faltaba la puerta, nos dijo el anfitrión que lo iban a arreglar el lunes de la semana siguiente a cuando nos íbamos, fue bastante incomodo ya que tenias que ponerte en una esquina para evitar mojar todo el suelo. Lo que menos nos gustó fue lo de la fianza de 100€ que tuvimos que dar antes de llegar por bizum o no nos daban los códigos y la dirección concreta del lugar, cosa que genera desconfianza. Al principio pensamos que fuera una estafa pero no fue así. Nos la devolvieron al dejar el piso después que la persona de limpieza comprobó que estaba todo bien. Hay que especificar que no fue en el momento de salir de la casa, tuvimos que esperar hasta las 16:30 habiendo dejado la casa a las 12:00. Y por ultimo hacia bastante frío aunque se encendían todos los radiadores eléctricos, y no nos dejó utilizar la chimenea.