Rose Cottage es una cabaña tradicional de pescadores de granito. La casa se ha ampliado a lo largo de los años y recientemente se ha restaurado a un alto nivel que combina hermosas características antiguas de Cornualles en un estilo contemporáneo de casa de playa. La casa está alejada de la carretera de la ensenada, mirando directamente para ver, ofreciéndole vistas panorámicas ininterrumpidas desde el frente de la casa. Puedes ver pasar el mundo desde la seguridad de la sala de estar durante una rara lluvia o disfrutar de un té al sol en el jardín delantero con vista a la bahía. La casa está totalmente equipada con Wi-Fi de fibra, y los precios incluyen todo el gas y la electricidad. Hay calefacción central y una gran estufa de leña para acurrucarse frente al fuego durante el invierno. Afuera, hay estacionamiento para 3 autos (dos en la entrada y uno en el garaje). Para las personas que se aburren, hay un jardín de aventuras, una mesa de ping-pong de tamaño completo y surf ilimitado o bodyboard de barril.