Pasamos unos días estupendos, no pudimos estar más a gusto. En plena naturaleza, disfrutando de la piscina y el bar. Hervás y el valle de Ambroz preciosos. El trato muy cordial, no sólo con nosotros sino también con nuestra perrita. Muchas gracias,volveremos!

Somos una familia con cuatro niños entre uno y siete años que pasamos una semana en agosto, y solo puedo decir cosas buenas. Unas casitas sencillas, limpias, cómodas, dentro de una finca preciosa rodeada de un paisaje espectacular. La finca tiene una piscina que es una maravilla que hace que cueste irte a hacer excursiones, te dan ganas de no moverte de ahí. Además patos, gallinas, conejos que hacen que sea todo todavía más encantador. Los niños allí son felices, mucha libertad y ningún peligro. Los dueños encantadores siempre dispuestos a todo, reciben muy, muy bien a los niños, da gusto ir a un sitio donde los niños son tan bien recibidos. Esperamos poder volver el año que viene.

Hemos pasado cuatro días fantásticos en una de las casitas y la verdad es que es un sitio de recomendar, tanto por el entorno como por el trato del propietario, una maravilla. Esperamos volver y sin duda recomendaremos este alojamiento!

Estuvimos un par de días y los niños no se querían ir. Allí campan a sus anchas y disfrutan persiguiendo a los conejos, montando en los columpios o jugando al fútbol. Aquello es un sitio perfecto apra desconectar y relajarse. Los dueños son muy amables y cercanos. Como crítica constructiva diría que deberían cuidar algunos detalles: no ponen jabón de ducha, el jabón de manos era prácticamente inexistente, la luz del porche ilumina muy poco...Son pequeñas cosillas, pero que no alteran mi excelente percepción del lugar. Volveremos por alí.

Hemos viajado este fin de semana con tres niños. Desde el alojamiento hasta el entorno inmejorable. Gracias Aurelio por todo. Sin duda volveremos...

Buenas! Ayer regresamos de un formidable fin de semana en Hervás, en las instalaciones de El Manantial del Fresno. Hemos ido tres familias con 8 crios de entre 2-6 años. Sitio perfecto para estar con ellos, ya que es un recinto seguro, con amplia visibilidad para saber donde están los niños y muchos recursos para divertirse y entretenerse sin salir del recinto, esto es, columpios, piscina, campo de fútbol, estanque con patos, gallinero con conejos y gallinas etc etc. Además, desdde el recinto se accede a un bosque de robles que cuenta con un paseo precioso en contacto absoluto con la naturaleza donde se pueden ver vacas. La instalación cuenta además con una tirolina, aunque actualmente no se puede usar ya que la quieren cambiar de sitio. En la recepción hay un espacio con sillones y el rincón perfecto para niños pequeños con juguetes, libros y cuentos donde los enanos se entretienen bastante. Las casa están muy bien. Los techos son muy altos y eso hace que se mantenga fresca la vivienda aunque haga calor fuera. Las habitaciones son muy grandes y versátiles, es decir, puedes mover las camas y personalizar un poco la vivienda para que la estancia sea còmoda. Además cuentan con cunas que te las dejan si las necesitas. La instalación está a 800 metros de la carretera que te lleva a Hervás, por lo que apenas hay 2 km hasta el pueblo y se puede ir dando un paseo por el carril bici. La piscina la tapan por la noche con manta tñermica por lo que mantiene una temperatura del agua perfecta para el baño. Los dueños, Aurelio y Sandra son encantadores. Son sencillos y cercanos. Gente normal que te hacen sentir en su instalación libre, cómodo y como en casa. La gente repite por varios años, ese es el mejor síntoma de que lo están haciendo bien. Es una relación de amistad más que mercantil. Y eso no es fácil conseguirlo. Muchas gracias familia por este estupendo fin de semana y que Valeria nazca con salud y sea una alegría más en vuestra vida. Un abrazo desde Toledo.

El sitio es muy bonito y tranquilo ideal para q los niños disfruten de la naturaleza, hay patos, gallinas y conejos. La piscina genial. Muy muy limpio y cuidado. Nos encanto. Cuando podamos volveremos

Pasamos unos días inolvidables, en Hervás en familia. Aurelio es una persona muy amable y de trato agradable. Nos indicó donde hacer senderismo por los alrededores, así como los lugares típicos para ver. Aunque no pasamos demasiado tiempo en las instalaciones, los ratos que estuvimos pudimos relajarnos ya que los niños disfrutaron del entorno. Es significativo que la mayoría de los clientes repetían su estancia. Sitio muy recomendable. Volveremos.