Viajamos para acudir a un congreso que se celebraba en el Bilbao Exhibition Centre, el cual estaba muy cerca del alojamiento, a unos 10 minutos andando. El alojamiento está en una zona muy tranquila, sin ruido en la calle (ademas las ventanas estaban muy bien insonorizadas) y está muy bien comunicado, había una parada de bus muy cerca con varias lineas que te dejaban en el centro de Bilbao y pasaban cada poco tiempo. El alojamiento era muy bonito, muy limpio, estaba muy bien cuidado, las camas eran bastante cómodas. El anfitrión Borja fue muy agradable, simpático y muy atento, tuvimos un pequeño percance al llegar que intentó solucionarlo lo más rápido posible. Sin duda la estancia fue bastante buena y agradable, volveríamos a repetir!