Una casa espectacular con un maravilloso mirador en la planta de arriba. Todas las habitaciones estaban en perfectas condiciones y la cocina y baños impecables. El patio interior da mucho juego (tiene nevera exterior) y hasta pudimos hacer una paella!! El trato con Mª José fue de 10!! 100% recomendable para unos días de campo y tranquilidad.

Como íbamos buscando campo, cumplió todas nuestras expectativas. La casa es grande y bonita, puesta con mucho gusto. Las camas son cómodas tanto por los colchones como por las sábanas de algodón limpísimas. Hay gran variedad de árboles en un jardín a la vez cuidado y agreste. Tiene muchos espacios diferentes tanto interiores como exteriores que permiten independencia a todo el mundo. Un diez

Fue una sorpresa, en las fotos no parece que la casa fuera tan grande por dentro, además es súper bonita. Maria José y Paco son muy agradables y nos explicaron todo perfectamente a la entrada. Además, antes de que llegaramos limpiaron los alrededores para que pudieramos usar unas porterías que hay justo al lado de la casa. La casa está perfectamente equipada para un grupo grande de personas (camas para todos, menaje, sábanas, toallas...). Es una casa para disfrutar durante una semana o más, es una lástima que sólo estuviésemos durante un fin de semana. Se respira tranquilidad, hay muchas zonas de descanso fuera de la casa, y por dentro, si mantienes las puertas y ventanas cerradas durante el día, la casa se mantiene súper fresquita, cosa que se agradece en verano. Además, el río está a nada andando y te puedes bañar en una playita que hay. Esperamos volver y poder disfrutarla durante más tiempo, muchas gracias Maria José y Paco!

La casa conserva su estructura original con su encanto y por dentro no le falta ningun detalle. Excelente decoración respetando los orígenes, muchos detalles. Las habitaciones todas con ducha y reformado de una manera exquisita. Todo a pedir de boca. El propietario muy atento a todo desde que hablamos por vez primera hasta que nos despedimos. Sin duda volveremos y lo recomendaremos. Es un espacio perfecto para compartir con familiares, amigos...

La casa está preparada con todo lo necesario. Tiene un exterior perfecto para ir con niños pequeños, ya que está vallado y es muy amplio. Se duerme muy bien, ya que es un sitio muy tranquilo, sin tráfico. Cerca hay un río al cual es muy fácil de llegar por el camino de la entrada y a la ermita. Tanto la entrada como la salida fue muy de fácil, y los dueños muy amables. Repetiremos!

La casa está decorada con mucho gusto y cuida mucho los detalles. No parece una casa de alquiler sino la casa de alguien que vive allí. Las fotos le hacen poca justicia ya que en realidad luce mucho más por la calidad de construcción sobre todo el salón, que tiene como dos espacios: la zona de la tv que es reducida y la entrada a la casa con ese techo súper alto que le da una amplitud y desahogo visual muy grande. Los cuartos de baño están muy bien y no se echa en falta que cada habitación tenga un baño por habitación. Tiene una pequeña cueva bastante chula. El pequeño patio de salida del salón da bastante desahogo también y la parcela y jardín es enorme aparte de todo el terreno que hay fuera de la valla. El trato de Mª José muy bueno pendiente de hacer las mejores recomendaciones de la zona. El entorno es muy chulo y permite paseos o caminatas de todos los niveles, ya que siguiendo el río se va llameando y si quieres campo a través hay unas laderas y cortados muy interesantes. La zona Del Río también muy bonita y realmente cerca de la casa. Supongo que en verano será un gozada darse un chapuzón allí. Una casa sin duda para repetir.

Fuimos 13 amigas a pasar un fin de semana increible, tanto la casa como las vistas desde ella eran alucinantes. Estabamos rodeados de naturaleza, la casa era grande y cómoda. Teníamos patio, porche... una auténtica gozada. Los propietarios ambos muy simpáticos y agradables. Sin duda, un sitio para volver.

Fuimos el pasado fin de semana a esta casa un grupo de amigos de la universidad, y nos encantó la casa. Es más grande de lo que parece, y no le ponemos ninguna pega. La casa es preciosa, las habitaciones cómodas, tiene un jardín precioso, y al lado está el río Júcar, donde te puedes bañar. Además cerca hay otros sitios que visitar (si es que quieres salir de la casa!), y el trato con los dueños fue estupendo (igual que el precio). Recomendable en todos los sentidos.