Pasamos un fin de semana espectacular en ese pueblo de cuento de hadas es como el paraíso, Casa Aldaba nos encanto además tienen restaurante en el cual comimos un día y es espectacular tanto la comida como la atención, Ignacio nuestro anfitrión una persona encantadora muy preocupado de que todo estuviese de nuestro gusto, cuando llegas en el apartamento tienes varias cosas para el desayuno todo muy bien presentado y bueno que nos encanto todo, y que conste que no somos de fácil contentar. Especial mención a Miguel Ángel es el encargado del museo etnológico, nos recomendó Ignacio que fuésemos a verlo ya que organiza rutas por la sierra visitando los distintos oficios que existían en la zona, el paisaje impresionante, las explicaciones de Miguel Ángel espectaculares no podéis dejar de visitarlo,

Absolutamente nada.

Todo: es bonito, acogedor, está limpio… Es un sitio perfecto para desconectar en medio de la naturaleza. Las vistas espectaculares. La chimenea es un gustazo.

Todo nos pareció genial.

Estuvimos muy cómodos es un pequeño apartamento con buenas vistas a la montaña. es cómodo y completo para pasar unos días de relax. consta de una salida donde esta incluida una pequeña cocina con frigorífico y utensilios para pequeñas comidas (desayuno y cena ligera). Está ubicada en un pequeño pueblo de la Sierra Norte de Madrid y prácticamente no nos encontramos con mas de unos cuatro/seis personas paseando. Tiene un pequeño bar donde poder picar algo para comida o cena. Lo que si se puede es ir hacer senderismo y desde allí visitar algunos pueblos de los alrededores.

Para los dias que estuvimos no necesitamos nada mas, quizás algún sitio donde poder comprar alguna cosilla (agua, algo de comida etc). Pero como ya he dicho hay pueblos cercanos donde buscar.