Absolutamente todo. La localización es perfecta, puedes llegar fácil y aparcar justo en la puerta (cabe destacar que nosotros fuimos en temporada baja) Además, tienes el parque de Cabárceno a escasos metros. La decoración del sitio es muy bonita y acogedora, tanto la interior como la exterior. La entrada a la posada es preciosa, con sus flores y sus arbustos, ya te incitan a que será un sitio especial. La habitación que nos dieron era preciosa, muy acogedora, con estores en las ventanas para evitar que la luz entre. Lo mismo en el baño. Las almohadas son las mejores que he probado en un hospedaje hasta el momento, donde suelen ser demasiado bajas. La habitación no colinda con otras, lo que te da más intimidad. El baño amplio y agradable, donde el agua tampoco acaba saliendo como también suele pasar en otros sitios. El personal muy amable y agradable, son parte de la experiencia. Los desayunos para nosotros eran de lo mejor, porque cada día iban variando y era una pequeña sorpresa. Todo muy bueno y de buena calidad. Destacar que la tortilla que te ponen por la mañana es recién hecha (cuando llegas y tomas asiento en su bonita terraza, oyes como empiezan a batir los huevos). La comida allí funciona por menú, teniendo tres platos a elegir de primero, y otros tres de segundo, con su postre, agua y vino. Muy bueno, merece la pena, además no es caro. Es perfecto para desconectar. En realidad nos enamoró por completo.

Lo único que al ser temporada baja para cenar no hay nada y tienes que ir fuera o pillar algo antes de recogerte.

The property is awesome, across the entrance of the park, the bedroom is huge and comfortable, the staff is super friendly. the breakfast is amazing and they have a really good restaurant, the best in town.

todo en general.

Great breakfast!

Breakfast was very good, natural orange juice, fresh fruit, good bread, scramble eggs or tortilla

very friendly and pleasant

nothing

Amazing breakfast and lovely staff