Una casa recientemente renovado situado por encima de una playa muy privada, Coco Flotante, ofrece espacios confortables elegantes interiores y al aire libre y magníficas vistas al mar.

La brisa del mar y el sonido de las olas llena una casa que ofrece espectaculares vistas del atardecer desde todas las habitaciones. De ocho a diez personas pueden permanecer aquí muy cómodamente, pero grupos más pequeños también podrán encontrar espacios íntimos del hogar acogedor y bien proporcionado. La primera planta dispone de dos master suites privadas con camas de matrimonio y baños en suite, además de una sala de estar con TV, una cocina bien equipada y una sala de lavandería. En el segundo piso, una habitación muy bien equipada con cama de matrimonio disfruta de sus propios puntos de vista particulares de suelo a techo del océano y comparte un baño tocador doble con el amplio dormitorio con dos camas en el pasillo. El bar y el salón espacioso es ideal para ver puestas de sol.

El corazón de la casa es su espacio al aire libre muy bien cuidados, con una gran mesa de comedor al aire libre, hamacas, ranchero, y áreas de estar íntimas a las afueras de ambos de los dos master suites del primer piso. Relájese en la piscina de borde infinito, siesta en una tumbona con palmeras susurro de arriba, o retirarse con la bebida en la mano para una cómoda silla bajo la sombra de la ranchera cuando el sol es fuerte.

La ubicación es nada menos que espectacular, con vistas sin obstáculos del Pacífico y el acceso directo a dos playas, que ofrecen arena, surf, buceo, y una clara falta de multitudes.

Situado poco más de una hora desde el aeropuerto de Liberia, o cuarenta y cinco minutos de cualquiera de Tamarindo o Santa Cruz, el pueblo de Junquillal es de fácil acceso, pero no demasiado desarrollado. Usted no encontrará discotecas y calles llenas de compras aquí, pero si estás buscando un relajado, tranquilo, ambiente auténtico, con fácil acceso a todo tipo de opciones, te encantará. Hay varios restaurantes en el área inmediata. Guías turísticos locales pueden organizar a caballo, tirolina, o recorridos por el río de la selva; y el senderismo, espeleología, observación de aves, ciclismo de montaña, buceo, o profundas aventuras de pesca de mar. A sólo dos kilómetros al norte (una caminata de media hora en la playa) es el surf de clase mundial de Playa Negra. Surf y stand-up paddleboarding lecciones y visitas estuario están fácilmente disponibles.

A cinco minutos a pie se llega a la larga extensión, plano de Playa Junquillal y su anidación de tortugas Santuario, que ha recibido el reconocimiento mundial. Desde el césped del Coco Flotante ver por la marea baja en Playa Blanca y que está a sólo dos minutos de buceo fantástico. Parque Nacional Palo Verde es de una hora de la casa y el Parque Nacional Rincón es de dos. Uno de los mejores campos de golf de Costa Rica se encuentra a media hora de distancia en el lujoso Hacienda Pinilla.

Los cuidadores de habla hispana que viven en las instalaciones son amables y atentos. No dude en ponerse en contacto con nosotros con cualquier pregunta.