Can Cervera es una masía destinada al turismo rural. Se trata de una casa rural aislada, rodeada de naturaleza. Es una construcción de grandes dimensiones, con habitaciones amplias y soleadas. Ha sido decorada, cuidando todos los detalles, con un estilo sencillo y rústico, y equipada con todos los objetos necesarios para que nos sintamos como en casa.

En cuanto a su capacidad, la casa ofrece 25 plazas, lo cual la convierte en un destino muy apropiado cuando se trata de grupos.

• 1 Habitación para 5 personas con dos camas dobles y una individual
• 2 habitaciones triples
• 3 habitaciones dobles
• 2 habitaciones cuádruples
• 5 Baños
• Salón
• Comedor
• Cocina
• Jardín

La casa rural Can Cervera se encuentra equipada con calefacción, y dispone además de una chimenea en su confortable comedor.

Se encuentra rodeada de naturaleza, que la hace muy adecuada para quienes viajan acompañados de niños. Encontraremos una zona de barbacoa, equipada con todo lo necesario para cocinar y comer al aire libre, como mesas, sillas y parrillas. También podemos disfrutar, durante la época estival, de una fantástica piscina.

Podemos alojarnos, si lo deseamos, acompañados de nuestras mascotas, ya que los animales son bien recibidos en Can Cervera.

Nos hallamos en un entorno natural ideal para las actividades al aire libre y para las prácticas deportivas. Podremos pasear en bicicleta, hacer senderismo, recoger setas y diversión siempre respetando los horarios de descanso de los vecinos.

En Riells y Viabrea, municipio perteneciente a la comarca de la Selva, podremos visitar algunas obras de su patrimonio histórico, como la Iglesia de Nuestra Señora de la Esperanza o como la Torre Montfort. En sus alrededores encontraremos también rincones naturales, que ofrecen parajes con un gran encanto y que forman escenarios muy bucólicos, como la Riera de Gualba.

En las proximidades, se encuentra el Parque Natural del Montseny, un auténtico paraíso para los aficionados al senderismo, a las excursiones o a las caminatas, actividades que les permitirá descubrir bellísimos rincones.

Se pueden visitar pueblos vecinos de gran interés turístico y paisajístico, como Hostalric, donde podremos admirar su Castillo de la Fortaleza, o como Breda, con un centro histórico de una gran belleza.

También podemos aprovechar la estancia para practicar el enoturismo, acercándonos a localidades como Serrat de Montsoliu, donde se elaboran prestigiosos vinos. Podremos visitar sus bodegas, en las que se guardan variedades como la Pinot noir y Chardonnay.

Podremos aprovechar la estancia para conocer la capital de la provincia, la monumental ciudad de Girona, que se sitúa a tan sólo 20 minutos en coche. En ella podremos descubrir su extenso patrimonio arquitectónico, que incluye obras como su Catedral o su barrio judío, conocido como el Call. La ciudad, pone además, a disposición del visitante, una amplia oferta cultural y de ocio.