Estancia de fin de semana en compañía de 6 amigos más, junto a nuestros respectivos 5 hijos adultos. Casa con todos los servicios necesarios, espacios amplios y con una persona que te soluciona cualquier consulta que pueda surgir referente a la casa viviendo a 1 minuto del alojamiento

Viajamos toda la familia, con nuestras mascotas a la boda de mi hermano con una asturiana. El alojamiento nos permitió vivir unos días inolvidables con toda las comodidades como las de nuestra propia casa. La amplitud de las habitaciones, las vistas sublimes y toda las facilidades tanto de la casa como de Marisa cuya calidad humana y calidez nos cautivó. Inolvidables las fabes que nos preparó. Absolutamente recomendable, nos quedamos con ganas de hacer mas turismo por la zona, pero disfrutamos de una paz y tranquilidad increíbles.

Somos 12 amigos que pasamos un fin de semana en esta casa, preciosa y muy acogedora. Unos días magníficos, a pesar del mal tiempo que tuvimos. Equipación muy buena y el trato excepcional, Marisa está pendiente de todo. Seguro que volveremos.

La casa es preciosa, enorme, y muy bien conservada. Habitaciones amplias y camas confortables. La cocina con todo lo necesario (menaje, electrodomésticos,...). El salón y office con chimeneas que tiran muy bien. Tanto los adultos como los niños y una perrina (4 familias), hemos pasado un fin de semana inolvidable. Una estancia totalmente recomendable.

La casona es una maravilla para pasar un fin de semana cálido en familia. Nosotros eramos un grupo grande y nos sentimos comodísimos, además de que la casa tiene un encanto especial tanto por la decoración como por la luz que entra por los enormes ventanales. El entorno es rural de ensueño que encaja perfectamente con la atmósfera de la casa, la cual además está perfectamente acondicionada para que no haga frío a pesar de que en Asturias la lluvia es un factor casi siempre presente. Además, el trato fue exquisito, pudimos cocinar y comer pote encargado que no sólo estaba delicioso si no que también fue muy barato y abundante. En resumen, la casa nos dejó enamorados a todos y todas por sus dimensiones, comodidad, arquitectura y decoración y atmósfera en general.

Tuvimos la fortuna de disfrutar de un tiempo muy bueno durante la semana que estuvimos en la Casona. El lugar es sencillamente impresionante, con unas vistas del entorno que son maravillosas. Todo se hace facil con Marisa y su marido en la casa de al lado y el trato con Juanjo fue facil y claro desde el principio. Recomendable, nosotros fuimos con un grupo de niños y mayores grande y estuvimos muy a gusto y no echamos en falta nada de nada a pesar de ello. Recomendamos este lugar.