Conocimos al anfitrión poco después de llegar y fue muy atento y amable. La casa está ubicada de manera inmejorable, pues es un barrio muy tranquilo, plenamente seguro, a unos 10 minutos andando al pueblo. (Cosa a tener en cuenta durante el fin de semana pues el pueblo se llena de coches) Se aparca fácilmente en la misma puerta. Valoro muy positivamente la zona de juegos/parque que hay por la parte trasera de las casas y que tiene salida directa, si viajas con niños es muy agradable que puedan jugar en la calle y verles desde casa. Las camas son cómodas y muy grandes. Antes de ir, te preguntan cómo quieres organizar la distribución de las habitaciones para juntar o separar las camas a tu gusto. La cocina está bien equipada, solo echamos de menos saber con anterioridad que la cafetera es de capsulas. En el jardín hay una barbacoa y un horno, super cómodo. La chimenea del salón también se llevó gran protagonismo, pues en diciembre se agradece. Además hay radiadores por toda la casa y no pasamos frío ninguno. Hay tres baños completos y las toallas eran de muy buena calidad y grandes.

Todo estaba francamente bien, solo echamos de menos un pelín de mantenimiento en el baño de una de las habitaciones de arriba y un enchufe en el baño de abajo.

A zona comum exterior

Das cortinas ( falta delas) e aquecedores no piso inferior não funcionam